La mayoría hemos tenido ese deseo tan popular: mejorar nuestra figura perdiendo peso. ¿Tal vez uno de los deseos más comunes en el planeta? Yo creo que muchos hemos compartido ese objetivo. No obstante, errores tras errores siguen existiendo cuando se trata de este tema.
A lo largo de este post, te explicaré de una manera amplia y detallada información que NECESITAS saber antes de comenzar a perder peso, así que comencemos.
1.- Perder peso no debe ser tu objetivo principal
Cuándo nos subimos a una báscula, podemos observar nuestro peso expresado en kilogramos. Una cuestión rara, pues si recuerdas tus clases de bachillerato, la fórmula establecida por Newton para el peso es:
Peso (Newtons) = masa (kilogramos) x gravedad (metros/segundo2)
Entonces, si el peso es una unidad en newtons, ¿Por qué nutriólogo me dice que peso 70 kilos y no 70 newtons?
La respuesta es sencilla; las básculas no nos dicen el peso (tú cabeza entra en conflicto en este momento). Las básculas nos dicen LA MASA.
¿Qué es la masa? Es la magnitud física que expresa la cantidad de materia que tienes
La cantidad de materia que tienes, está definida por TODOS los átomos que te conforman
Una vez entendido este concepto, debes saber que por términos de practicidad en el mundo y a partir de ahora en este sitio web el peso será el concepto que usemos para referirnos a la masa.
Entonces:
Peso = Masa
¿Y para que me explicas todo esto?
La razón es la definición que te acabo de dar más arriba: la masa expresa la cantidad de materia que tienes
Si la báscula pasa de 70 kilogramos a 69, significa que tienes 1 kilogramo menos de masa corporal. NO DE GRASA CORPORAL.
Tú masa está conformada por TODA LA MATERIA. Es decir, músculo, hueso, grasa, agua, minerales y entre otras sustancias y tejidos que te forman.
Cuando se quiere perder peso, el objetivo es vernos mejor, deshacernos de aquellos “excesos” o “llantas/lonjas” formados en gran parte por tu grasa corporal. El problema es que perder peso no significa obligatoriamente perder grasa y no perder peso no significa tampoco que no perdiste grasa.
Ahí el problema, que muchos se obsesionan con su masa corporal, pero al representar toda la materia que nos forma… es sumamente variable. Si tú consumes más agua, tu masa aumentará, si te deshidratas disminuye, si hay comida en tu intestino aumenta, si está vacío va a disminuir y todo esto podría verse reflejado en la báscula, volviéndola una montaña rusa que puede ser cruel con tus emociones.
Imagina una persona que disminuyó su grasa en 3 kilogramos pero aumentó 3 kilogramos de músculo. Su masa se mantendrá igual, pues perdió 3 kilogramos de algo pero los ganó de otra cosa, la báscula marcará lo mismo pero su aspecto físico será diferente.
Si esa persona se centra solo en el peso que marca su báscula, se va a frustrar. Pero si entiende que su cuerpo podría haber cambiado incluso sin que la báscula lo refleje, habrá dado el siguiente paso para poder seguir mejorando.
Ahora imagina un ejemplo más sencillo; una persona comió mucho el día anterior, eso le hizo retener agua, minerales y otras sustancias por lo que la báscula marca 2 kilogramos más. ¿Debería esa persona frustrarse? NO, porque no significa que aumentó 2 kilogramos de grasa, si no de la masa total, es decir; un sinfín de sustancias.
Entender esto te sirve para algo: ser más estable emocionalmente ante esos cambios repentinos en tu báscula y esa estabilidad emocional es MUY IMPORTANTE para poder seguir con tu objetivo
Conclusión: No te centres solo en tu peso corporal.